
Y casi, casi, echarle abono. Y es que es habitual que cuando
una empresa o profesional ‘hace’ o manda hacer su página web y ésta está ya en
el aire el tema parece quedar zanjado. Por un tiempo. Unos años. O los siglos
de los siglos, amén.
Pues esto es un grave error de concepto. Las empresas y los
profesionales somos seres vivos, con corazón, con alma, con ideas, con
altibajos… Cambiamos de talla de ropa, cambiamos de costumbres, cambiamos de
móvil y a veces hasta cambiamos de opinión. Pero esperamos que la página web
quede inalterable por el tiempo.
No te puedes hacer una idea de la cantidad de veces que hago
modificaciones en mis páginas web. Con mucha frecuencia pulo elementos de
diseño, fotos y textos. A menudo es porque soy una perfeccionista del copy y
siempre encuentro algo que pulir, pero otras veces es porque he cambiado el
enfoque en algo, tengo nuevas fotos de producto etc. Y la estructura la reviso
al menos una vez al año. Sí, es tanto trabajo como parece. Y no, al igual que a
ti, no me sobra el tiempo.
Sé que es un gran esfuerzo, pero a diario me encuentro con
páginas web desfasadas, poco usables o que directamente no representan el
sentir actual de la empresa o no están orientadas a los objetivos del negocio.
Lo cual, además de ser una pena, es un problema.
¿Sabías que el 80% de las personas investigan en Internet
antes de comprar? (según un estudio de la consultora Deloitte) ¡El 80%!
Sí, si alguien está interesado en tu producto o servicio va a investigarte en Internet. Quiere ver tu web, la ficha de tu producto o servicio, comentarios o referencias de otros clientes… Quiere conocerte mejor: ¡pónselo fácil!
Sí, si alguien está interesado en tu producto o servicio va a investigarte en Internet. Quiere ver tu web, la ficha de tu producto o servicio, comentarios o referencias de otros clientes… Quiere conocerte mejor: ¡pónselo fácil!
Checklist básica para
saber si tienes que actualizar tu página web
- ¿El logotipo que aparece es el que tiene que ser o es uno que fue… hace 15 años?
- ¿La dirección postal, teléfonos de contacto etc. son correctos?
- ¿El catálogo de productos o servicios está desfasado?
- ¿Tu foto o la foto de la oficina o el edificio tiene más de 2 años?
- ¿Los textos de tu web son adecuados para tus clientes actuales o parecen haber sido escritos hace 20 años?
- ¿Tu página web se ve sin dificultad en un Smartphone?
- ¿Tu página web, mediante sus textos y mensajes, refleja a qué se dedica la empresa y qué ofrece?
- ¿Hay páginas o imágenes que no cargan, enlaces rotos?
- ¿Hay vínculos en tu página web a tus perfiles en redes sociales, si los tienes?
- ¿Qué hay de los textos legales de tu web?
Dicho de otro modo, necesitas ¡ya! revisar / rediseñar tu página web si:
- No se ve correctamente en dispositivos móviles (el famoso diseño responsive)
- Su aspecto es obsoleto, pasado de moda (y es notorio)
- Tus clientes no encuentran la información que buscan
- Tu catálogo de productos / servicios está obsoleto
- Has cambiado o rediseñado tu imagen corporativa o tu posicionamiento en el mercado
También te aconsejo revisar tu web ya que continuamente salen
nuevas soluciones y funcionalidades que pueden ayudarte en los objetivos de tu
negocio (conseguir más contactos, solicitudes de presupuesto, notoriedad etc.).
Cualquier negocio, sea cual sea está vivo. No importa que
seas freelance, profesional independiente, comercio, empresa del sector
industrial… Las webs del principio de Internet, webs estáticas, han
desaparecido: los clientes quieren más y mejor información, actual y fresca,
como consejos útiles, ofertas y promociones, juegos y entretenimientos…
Está claro que no todos tenemos recursos para llegar a
cierto nivel, pero sí hay unos mínimos que una página web debe cumplir. Y, si
tienes página web, debes contar con unos ciertos gastos de mantenimiento al
año, no sólo de la parte técnica, sino también de la parte de diseño y
contenido.